Vehículo detenido al costado de la carretera, con el capó levantado y el motor de automóvil hirviendo. ¿Quién no ha visto nunca esta escena o incluso la ha experimentado de primera mano, verdad? A pesar de ser un problema muy común, lo cierto es que este sobrecalentamiento del motor sigue siendo un motivo de dolor de cabeza para muchos conductores y mecánicos de todo el mundo.
Y seamos realistas, para aquellos que viajan mucho, la perspectiva de tener que lidiar con el motor del auto hirviendo de la nada, sin previo aviso y en medio de la carretera no es agradable. El problema es que la falta de mantenimiento periódico y cuidado esencial del automóvil puede hacer que los componentes se calienten de manera anormal y, por lo tanto, vale la pena comprender mejor las posibles causas. ¡Ven con nosotros!
Motor de automóvil hirviendo: explicando a los clientes del taller
Conducir, o disfrutar de la conducción, no obliga a nadie a entender todo sobre el motor. Por lo tanto, aunque algunos problemas son muy obvios para los expertos y los reparadores, es importante saber cómo explicar estas situaciones al conductor promedio. Este suele ser el caso de aquellos que se encuentran con un motor de automóvil hirviendo.
Este conductor probablemente ya sabe que el auto quema combustible para producir energía y hacerlo avanzar, como si fuera una caldera sobre ruedas, y que, por tanto, hay mucho calor en su interior. Pero el cliente que busca el taller puede no saber que todo este calor normalmente no se siente precisamente por el sistema de refrigeración.
Aquí, vale la pena explicarle que este sistema utiliza varios componentes para controlar la temperatura del motor y otras partes del auto y, si esto no sucede, es porque algo anda mal. Lo mismo ocurre con el aceite de motor y otros elementos comunes de desgaste rápido. Y una vez que se aclara esa opinión inicial, ¡es hora de sumergirse en el diagnóstico oficial! ¿Vamos?
Revisando los componentes principales
Cuando se produce un sobrecalentamiento del motor, puede traer otros daños peores a algunos componentes, o incluso provocar un incendio. Por eso es importante entender por qué ocurre esto, cuáles son algunos signos a los que hay que estar atentos, cómo evitar el problema y, en particular, cómo debe actuar el conductor cuando se encuentra en esta situación. Así que anote:
Revisar el aceite lubricante
Si el cliente llega al taller con el motor del automóvil hirviendo, su primera pregunta debe ser cada cuanto tiempo hay que cambiar el aceite. Recuerda que el aceite del auto tiene una vida útil y, pasado ese plazo, tiende a perder su viscosidad, además de acumular mucha más suciedad de la recomendada. Debido a esto, el aceite pierde su poder lubricante y hace que las partes del motor entren en contacto directo.
Hablamos de la peligrosa fricción metal contra metal, que aumenta mucho la temperatura del coche, además de provocar un enorme desgaste en el propio motor. La solución en este caso es retirar todo el aceite viejo (aunque sea necesario limpiar los lodos del motor) y cambiarlo por uno nuevo. Elegir entre aceite semisintético o sintético dependerá del manual de tu auto, pero la opción sintética suele ser mejor.
Atención al sistema de refrigeración
Por otro lado, si el aceite se ha cambiado a tiempo, el problema podría estar en el sistema de refrigeración – aquí las causas pueden ser variadas. Una fuga de agua en alguna parte del sistema, por ejemplo, o el uso de agua del grifo en su interior son algunos de los problemas más habituales.
De hecho, muchos conductores aún no saben esto, ¡pero usar agua del grifo en el depósito de refrigeración es peligroso! Eso es porque esta agua es tratada con cloro, una sustancia que acelera el desgaste de las partes móviles del cabezal, elevando la temperatura del motor.
Se debe revisar la válvula termostática
Otro elemento que el mecánico debe revisar es la válvula termostática. Recordemos que, en condiciones normales, el motor del auto funciona a temperaturas cercanas a los 90°C. Cuando se supera esta marca, es esta válvula la que permite el paso del agua fría procedente del radiador al circuito, reduciendo la temperatura del motor.
Si, por casualidad, este componente se traba en la posición cerrada, no habrá refrigeración durante las altas temperaturas del motor, lo que provocará un sobrecalentamiento. ¡Así que revise cuidadosamente y reemplace inmediatamente si es necesario!
Esté atento a las fallas de la bomba de agua
No hay mucho secreto aquí: la bomba, presente en cualquier motor, es responsable de sacar el refrigerante del depósito, permitiéndole circular a través del sistema y los componentes del motor. Por lo tanto, una falla o no funcionamiento de este elemento es suficiente para impedir el control de la temperatura en el vehículo.
El reparador ya sabe que, sobre todo en aquellos vehículos en los que se descuida el mantenimiento periódico, es habitual que esta bomba simplemente deje de funcionar por completo o empiece a funcionar con potencia reducida. Por lo tanto, verificar el rendimiento de este sistema también debe estar entre las prioridades ¡cuando llega al taller un cliente con un motor de automóvil hirviendo!
Y recuerde: siempre refuerza la importancia de las revisiones periódicas
La verdad sea dicha, la revisión del auto es una de las mejores acciones para los conductores que quieren cuidar su inversión y, por supuesto, evitar que el tan temido motor del automóvil hirviendo. Además, es una práctica que ayuda a mantener el valor medio del vehículo, indica procedimientos cruciales de mantenimiento y seguridad a los usuarios y permite al profesional que la realiza seguir todo el historial de cambios realizados.
En este sentido, el mecánico siempre debe reforzar la importancia del mantenimiento preventivo y las revisiones, manteniendo informado al cliente y poniéndose a disposición para resolver cualquier duda. Para ello, un buen consejo es llevar un registro de todas las visitas, cambios y reparaciones que soliciten tus clientes. Así, es más fácil acceder a los “ficheros” de cada cliente y agilizar los diagnósticos.
Ah, y no olvides que la mejor manera de no correr riesgos innecesarios es estar seguro del origen de las piezas que estás comprando para reponer el stock de tu taller de reparación de automóviles. ¡Por lo tanto, asegure la calidad de la revisión y la satisfacción del cliente con las piezas de RIO! ¡Visite nuestro sitio web, descubra nuestro portafolio y entre en contacto con nuestro equipo!
