Motor quemando aceite y humo saliendo por el escape puede ser una clara señal de que es hora de realizar el mantenimiento de los anillos de pistón. Después de todo, el exceso de humo suele indicar que los anillos han perdido su función principal, que es la de sellar, lo que hace que el motor pierda compresión y eficiencia, aumentando el consumo de combustible y reduciendo la vida útil del automóvil.
Y no se equivoquen: este pequeño conjunto de piezas es extremadamente importante. Recuerde que la acción de los anillos interfiere directamente con la potencia del motor, ya que son ellos los encargados de controlar el flujo de aceite en las paredes del cilindro, asegurar la compresión en la cámara de combustión y conducir parte del calor generado durante el funcionamiento del motor.
Es por eso que, pensando en simplificar la rutina del taller, hemos preparado un artículo para ayudar a comprender mejor el cuidado del mantenimiento de los anillos de pistón, las peculiaridades de cada uno de ellos en el conjunto del motor y las principales causas de los problemas y defectos de estos componentes. ¡Acompañe!
Día a día del taller: los enemigos de los anillos de pistón
Aquí en el blog, ya hemos hablado sobre el funcionamiento de los anillos de pistón y hemos destacado su importancia para el vehículo. Ahora, ha llegado el momento de que aprendamos más sobre los desafíos del mantenimiento de los anillos de pistón y, para ello, nada mejor que una visión general de los principales elementos que causan el desgaste prematuro de los anillos. Aquí está:
1 – Falta de mantenimiento
Quienes trabajan en la reparación de automóviles saben que el efecto de la abrasión en la superficie de los anillos, causado principalmente por el exceso de residuos metálicos, acelera el proceso de desgaste de estos componentes. ¿Pero cómo evitar que estos pequeños desechos afecten el funcionamiento de los pistones? La respuesta es simple: mantenimiento preventivo.
La sustitución del lubricante del motor y el cambio de los filtros de aire y de aceite según las especificaciones del fabricante contribuyen en gran medida a la longevidad de los anillos y del pistón, porque aseguran la correcta lubricación de los componentes.
2 – Rectificado del motor
El bruñido es un proceso muy familiar para los que trabajan en talleres mecánicos y rectificadoras. En la práctica, se encarga del acabado de las paredes del cilindro. El problema es que, cuando el bruñido no se realiza de forma correcta, es posible que la rugosidad se convierta en puntos de fricción con los anillos de pistón, acelerando el desgaste de estas piezas.
Ah, ¿quiere decir que cuanto más pulido mejor? Al contrario: el pulido excesivo, conocido como cilindro espejado, también es perjudicial para el motor del coche, ya que reduce la adherencia del aceite debido a las paredes muy lisas, comprometiendo la lubricación y, una vez más, dañando los anillos!
3 – Falla en la manipulación
Además de ser extremadamente importantes para el motor, los anillos de pistón son piezas muy delicadas. Tienen una cierta elasticidad, dimensionada a la presión correcta en los lados del cilindro. En este sentido, no es raro que, durante la instalación, el profesional acabe forzando demasiado estos componentes.
El problema es que no se puede hacer la vista gorda ante este tipo de problemas. Cualquier deformación generada durante la aplicación, por pequeña que sea, puede evolucionar cuando el motor comienza a funcionar, causando fricción, grietas e incluso roturas en esas partes.
Precauciones con la instalación y el mantenimiento de los anillos de pistón
Otro punto que merece atención extra de los mecánicos automotores es el proceso de diagnóstico y mantenimiento de los anillos de pistón. Esto se debe a que, para evaluar la condición de los anillos y determinar si deben ser reemplazados o no, es necesario analizarlos junto con la geometría del pistón y el cilindro.
Lo ideal es que el mecánico observe en la práctica el contacto entre el conjunto de anillos y el cilindro, que debe hacer correr los anillos a lo largo del cilindro y observar la circularidad del conjunto: si hay demasiado espacio o fricción entre los anillos y el cilindro, se quemará aceite, habrá fugas de compresión y desgaste de los componentes. En otras palabras, necesitan correr libremente, pero en la medida precisa.
Y no olvide que, en el proceso de montaje de los anillos en las ranuras del pistón, los manuales recomiendan una diferencia en la posición de las puntas. La idea es evitar que se alineen las puntas durante el funcionamiento del motor, ya que es común que roten dentro de las ranuras. Después de todo, esta alineación puede crear una especie de brecha, causando que la compresión del motor caiga y el aceite se queme!
Dicho esto, está todo listo para ponerse a trabajar y realizar el mantenimiento de los anillos de pistón con todo el cuidado que requiere la tarea? ¿Qué tal aprovechar y ver más consejos complementarios de los que también entienden el tema? Tenemos un video exclusivo del Dr. Carro, parte de nuestra web serie especial sobre las líneas de productos de Riosulense! Aproveche: