Quien trabaja en reparación automotriz saben que disponer de las herramientas adecuadas es fundamental para garantizar el éxito del negocio. Le guste o no, estas le ayudan a hacer el trabajo, mejorar la eficiencia de su servicio y reducen el tiempo que los vehículos están parados en reparación. En este contexto, los avances tecnológicos para los talleres mecánicos contribuyen cada vez más a la rutina de trabajo de los profesionales del sector.
Después de todo, con las constantes innovaciones tecnológicas, los vehículos pasaron a contar con una ingeniería más compleja. Y está claro que, ante un mercado súper competitivo, estar atento a las novedades y estar siempre al día con las nuevas técnicas ya no sólo una diferencial, sino que, ¡pasó a convertirse en una necesidad real!
Esto se debe a que la tecnología incorporada en los automóviles crece a un ritmo acelerado y, junto con los avances tecnológicos que modifican la industria del automóvil, el sector de la reparación tiene la obligación de actualizarse. Los talleres tradicionales con entornos oscuros, muchas herramientas manuales y sin sectores específicos están dando paso a un nuevo enfoque, con entornos más receptivos y tecnológicos.
Las nuevas herramientas aportan más tecnología a los talleres mecánicos
¿Recuerda cuando fue necesario desmontar todo el bloque del motor para localizar y corregir cualquier problema? ¿O cuando todos los componentes eléctricos necesitaban ser removidos y probados uno por uno? Corregir defectos en la inyección electrónica, entonces, ¡de ninguna manera! Situaciones como esta solían ser la excepción y, sin el debido cuidado, se convirtieron en verdaderas fuentes de dolor de cabeza para los mecánicos y también para sus clientes.
Sin embargo, el rápido avance tecnológico de la industria automotriz ha hecho que estas excepciones se hayan convertido en la norma, y hoy en día las cosas ya están funcionando de manera muy diferente. Si antes era posible confiar sólo en los sentidos como la vista, el oído, el olfato y el tacto para identificar un defecto en el vehículo, ahora las exigencias son mucho mayores.
Y dado que todo buen diagnóstico requiere herramientas y equipos eficientes, ¿qué tal si revisamos algunos que son indispensables para asegurar el éxito de su negocio?
Escáneres automotrices, inyección electrónica y revisión eléctrica
En la mayoría de los automóviles actualmente en circulación, un módulo ECU (Unidad de Control Electrónico) se encarga de identificar la cantidad de aire que está siendo admitido por el motor, la temperatura del agua del sistema de refrigeración, la temperatura del aire, la posición del acelerador, entre otros.
Con esta información, la ECU determina, por ejemplo, la cantidad de combustible que se inyectará a través de las boquillas, la velocidad óptima de ralentí en ese momento, el punto de ignición, la sincronización exacta de la chispa en la bujía y varias otras acciones que contribuyen al rendimiento del automóvil. Todo muy práctico – ¡al menos hasta que la luz de inyección se encienda en el panel!
Hasta hace poco, incluso los mejores profesionales tardaban al menos un día entero en identificar el origen del problema. Gracias al escáner para inyección electrónico, todo este proceso ahora ¡sólo tarda unos minutos! Ampliamente utilizada en las líneas de montaje de los fabricantes de vehículos, hoy en día esta herramienta ya está presente en talleres especializados de todo el país.
Y aquí viene también el osciloscopio, otro poderoso aliado de los talleres, ideal para realizar diversos diagnósticos de los componentes del sistema eléctrico del vehículo midiendo las oscilaciones de pulsos y las corrientes eléctricas. Con el apoyo de esta tecnología para los talleres, es posible recibir y potenciar, en tiempo real, todos los parámetros de funcionamiento de la inyección electrónica del vehículo, agilizando la detección y corrección de posibles fallos en el sistema. Esto significa que, además de poder entregar un diagnóstico a sus clientes en un abrir y cerrar de ojos, ¡también ahorra mano de obra y tiempo para la ejecución de los servicios!
Diagnóstico por imagen: boroscopios y videoscopios de inspección
Taque golpeando, problemas en la boquilla inyectora, cilindros agrietados y asiento de válvula desgastado. Ya sea que trabaje en un taller de reparación o en una rectificadora de motores, usted ya sabe lo que estos problemas tienen en común: todos requieren que se abra el motor y se retire el cabezal para que tenga una idea precisa de la magnitud del daño.
La buena noticia es que, en los últimos años, la aparición de tecnologías cada vez más compactas y accesibles también ha abierto espacio para que los ¡boroscopios y videoscopios invadan el mercado de soluciones para la reparación de automóviles! Con estas herramientas en el taller, es posible realizar una batería real de pruebas de diagnóstico por imágenes en el motor del automóvil incluso antes de desmontarlo.
Mientras que el boroscopio funciona de manera similar a la endoscopia, en la que se inserta un cable con una pequeña cámara en el extremo en el bloque motor, el videoscopio actúa como una especie de ultrasonido, donde es posible ver a través de unas pocas paredes más delgadas del bloque.
Con estas herramientas en el taller, es mucho más fácil verificar con precisión los problemas del motor y, por supuesto, entregar un presupuesto justo a sus clientes. Después de todo, usted puede identificar, incluso antes de ensuciarse las manos, cuántas y qué piezas necesitan ser reemplazadas, qué tipo de mano de obra se necesitará, e incluso ¡trabajar con estimaciones de tiempo de servicio!
Esto significa que, para diferenciarse de la fuerte competencia en el mercado de la reparación de automóviles, es indispensable invertir en eficiencia. En este sentido, apostar por soluciones tecnológicas especiales para talleres mecánicos debe ser una de las prioridades del dueño del negocio, ya que hace que sus servicios sean más precisos y rápidos, reduciendo costos y fidelizando a sus clientes.
Y recuerde que, además de todo esto, ¡tener un buen proveedor de repuestos hace toda la diferencia! Aquí en Riosulense, usted encuentra un portafolio completo de reposición, con piezas de calidad superior y la garantía de procedencia que ya es ¡marca registrada!
